lunes, 19 de diciembre de 2016

En Cuerpo y Alma el "aquí y ahora"


Muy querid@s acompañantes de este viaje en cuerpo y alma:
Próximas ya a finalizar este año 2016 y este trimestre en el que hemos estado  trabajando en nuestras sesiones en el concepto del "aquí y ahora",  y en su práctica, quiero hacer un cierre como merece... elevando la mirada hacia nuestra dimensión de seres también  espirituales. Por supuesto sin divisiones, si no en interrelación  cuerpo, mente, emociones, alma.  Cada vez más salen estudios de los efectos que tiene el tener en cuenta esta dimensión, en nuestro bienestar global.  Está bien que la ciencia lo respalde pero lo mejor !es probarlo! Y comprobarlo por nosotras mismas. 

Una de las ideas que normalmente trato de compartir es que la vida es casi siempre muy simple y fácil de disfrutar. Y cuando no podemos verla así en general es porque nos concentramos en ciertos aspectos negativos de lo que sucede a nuestro alrededor y condicionamos nuestro bienestar a la solución de una interminable lista de problemas.

También muchas veces propongo recordar nuestra dimensión de SER espiritual, cada cuál como lo sienta y entienda (religioso, ecológico transpersonal,  místico, etc), y poder conectar  y colocarse en esta  dimensión cuando no nos sentimos bien o si necesitamos algo que no podemos conseguir con nuestro propio esfuerzo individual. Poder sentirnos Unidad, formando parte del Todo, logrando así  alejar la profunda soledad que podemos llegar a sentir en momentos vitales críticos, ya sean por razones externas o internas. En realidad somos parte de ese Todo, y podemos volver a conectarnos con esa Fuente a través de cualquier actividad que expanda nuestra conciencia, como la oración, la práctica de la meditación, la conexión profunda con la naturaleza o la apreciación deliberada de cada cosa buena que nos rodea aquí y ahora.

Aquietar nuestra mente y experimentar gratitud serían entonces las claves olvidadas para recuperar ese bienestar que tanto anhelamos. !Qué idea tan simple y poderosa!

Seguramente repito tanto este mensaje porque es el que yo misma estoy tratando de aprender…  
Quisiera ser cada día como como una protagonista que comprende que algo no va bien en su realidad y decide liberarse de la pesada carga que la limita, que tiene el coraje de elevarse siempre, confiando en su intuición.

Porque aunque comprendamos que la vida es simple y fácil de disfrutar y que podemos convocar a ese Todo, del que formamos parte, para crear conscientemente la realidad que deseamos, de todas maneras tenemos que tomar la decisión de hacerlo de una buena vez, debemos esforzarnos para sostener e incrementar nuestro nivel de consciencia. Porque si no hacemos nuestro mejor esfuerzo podemos seguir actuando indefinidamente de manera mecánica, como nos sucede habitualmente cuando nos identificamos con nuestro ego y vivimos de acuerdo a sus creencias limitantes.

Para ser felices tenemos que esforzarnos con mucha atención, y debemos ser también disciplinadas… aunque esta idea parezca contradictoria no lo es. Se trata de asumir la responsabilidad de nuestro bienestar y aplicarse a ello con las  herramientas  que vamos conociendo, la actitud adecuada y la pasión y determinación que se requiere. 

 Muy Felices Fiestas y muy Próspero en bienestar para todos los seres sintientes del planeta y de las galaxias.  


Ha sido un honor y un placer acompañaros en este proceso de conocimiento y práctica del "aquí y ahora" Mi agradecimiento y cariño por permitírmelo.
Namasté queridas.
Inés

Aquí dejo un vídeo musical con mandalas para potenciar esa energía creadora de bienestar.


Os dejoUn  este vídeo musical con ara activar la energía creativa de bienestar. Espero que os guste

martes, 13 de diciembre de 2016

El "aquí y ahora" No tiene edad



No importa la edad... la vida hay que disfrutarla hoy, mañana y siempre!
Esta bella señora se manifiesta improvisadamente en la vía pública, maravillando por un momento a viandantes.


Ammar Dafri, también conocido como Power Beat , es un artista beatbox nacido en Argelia. Mientras estaba en la calle  interpretando música una señora mayor estaba caminando junto a su perro cuando oyó el beatboxing interpretado por Dafri. Frenó su caminata y les dio un espectáculo de danza increíble.  "Esta mujer bailando realmente me tocó muy adentro", cuenta Dafri. 

He aquí una muestra de vivir plenamente el aquí y ahora sin autocensuras y saltando mandatos sociales  generacionales. 

NAMASTÉ QUERIDAS. 

lunes, 5 de diciembre de 2016

PRESENTE EN MI CUERPO


De repente !mi cuerpo!

`La poeta, escritora y activista Eve Ensler vivió en su cabeza. En esta potente disertación de TEDWomen, habla sobre la desconexión de su cuerpo, que duró toda su vida, y de cómo dos eventos impactantes la ayudaron a conectarse con la realidad, la la realidad física de ser humana

La enfermedad no es más ni menos que un indicador de que hay algo que tenemos que corregir en nuestra vida, o que al menos obviamos hacer. El tomar conciencia de ello es imprescindible para poder realizar el cambio que nos lleve a recuperar el bienestar. La salud es el resultado de estar en consonancia con lo que sentimos.

El cuerpo es el vehículo que utilizamos para realizar esta experiencia humana. Imaginemos una pantalla de cine donde se proyecta una película. El cuerpo es esa pantalla donde se proyecta la historia. La película no es la pantalla, es un medio para que podamos verla, pero la película en sí está en otro lado. Así, nuestra vida es una magnífica saga proyectada en el cuerpo, y en él se cuenta nuestra gran historia, la pasada, la presente y la que vendrá. En nosotr@s está elegir cómo queremos vivir y qué historia contar. En cada uno/a está el elegir cómo queremos que continúe la saga.
Encontré esta entrada en el blog https://radianceradionica.wordpress.com, a donde llegué de manera fortuita... supongo que me llevó la intuición que siempre es sabia,  y me pareció muy interesante para compartirlo con vosotras. 
Me encantarían muuuuuchos comentarios... opiniones varias... Ya sabéis... si por aquí no lo conseguís por favor enviarlos a mi correo mosaicodeideas@gmail.com y yo los incorporo a la entrada en  vuestro nombre.
 Namasté.
Inés

jueves, 1 de diciembre de 2016

FELICIDAD "AQUÍ Y AHORA"

Imagen de James Jean


Todas las personas podemos alcanzar la felicidad plena, aquí y ahora. Aunque resulte muy difícil hacer de esta idea una experiencia real y permanente, maestr@s de distintas tradiciones la expresaron de diferentes maneras, en todas las épocas.
En cada momento de nuestras vidas, en cada circunstancia, casi sin excepciones, existen los suficientes elementos maravillosos como para colmarnos de dicha, de felicidad plena. Pero en lugar de asombrarnos y de disfrutar de lo que cada instante nos ofrece, damos por hecho esos pequeños milagros, los consideramos ordinarios, naturales y cotidianos, y, en cambio, destacamos y nos concentramos en eso de lo que el momento carece.
A continuación un relato muy breve de Jorge Luis Borges, publicado en el año 1934, y que es en realidad su versión de una de las narraciones más originales y sugestivas de Las mil y una noches.

En la idea de "el aquí y ahora" me parece para  interpretarlo como una invitación a descubrir los tesoros que tenemos siempre a mano, como una parábola que propone que la búsqueda del bienestar o de la felicidad “afuera” de nosotras mismas puede conducirnos a la comprensión de que ese estado tan anhelado siempre estuvo a nuestro alcance en nuestro interior… precisamente aquí y ahora.

HISTORIA DE LOS QUE LO SOÑARON

Cuentan hombres dignos de fe que hubo en El Cairo un hombre poseedor de riquezas, pero tan magnánimo y liberal que todas las perdió menos la casa de su padre, y que se vio forzado a trabajar para ganarse el pan.
Trabajó tanto que el sueño lo rindió una noche debajo de una higuera de su jardín y vio en el sueño un hombre empapado que se sacó de la boca una moneda de oro y le dijo: “Tu fortuna está en Persia, en Isfaján; vete a buscarla”. A la madrugada siguiente se despertó y emprendió el largo viaje y afrontó los peligros del desierto, de las naves, de los piratas, de los idólatras, de los ríos, de las fieras y de los hombres.
Llegó al fin a Isfaján, pero en el recinto de esa ciudad lo sorprendió la noche y se tendió a dormir en el patio de una mezquita. Había, junto a la mezquita, una casa y por decreto de Alá Todopoderoso, una pandilla de ladrones atravesó la mezquita y se metió en la casa, y las personas que dormían se despertaron con el estruendo de los ladrones y pidieron socorro. Los vecinos también gritaron, hasta que el capitán de los serenos de aquel distrito acudió con sus hombres y los bandoleros huyeron por la azotea.
Foto del escritor Jorge Luis BorgesEl capitán hizo registrar la mezquita y en ella dieron con el hombre de El Cairo y le menudearon tales azotes con varas de bambú que estuvo cerca de la muerte. A los dos días recobró el sentido en la cárcel. El capitán lo mandó buscar y le dijo: “¿Quién eres y cuál es tu patria?” El otro declaró: “Soy de la ciudad famosa de El Cairo y mi nombre es Mohamed El Magrebí”. El Capitán le preguntó: “¿Qué te trajo a Persia?” El otro optó por la verdad y le dijo: “Un hombre me ordenó en un sueño que viniera a Isfaján, porque ahí estaba mi fortuna. Ya estoy en Isfaján y veo que esa fortuna que prometió deben ser los azotes que tan generosamente me diste”.


J. L. Borges
Ante semejantes palabras, el capitán se rió hasta descubrir las muelas del juicio y acabó por decirle: “Hombre desatinado y crédulo, tres veces he soñado con una casa en la ciudad de El Cairo, en cuyo fondo hay un jardín, y en el jardín un reloj de sol y después del reloj de sol una higuera y luego de la higuera una fuente, y bajo la fuente un tesoro. No he dado el menor crédito a esa mentira. Tú, sin embargo, engendro de mula con un demonio, has ido errando de ciudad en ciudad, bajo la sola fe de tu sueño. Que no te vuelva a ver en Isfaján. Toma estas monedas y vete.”
El hombre las tomó y regresó a su patria. Debajo de la fuente de su jardín (que era la del sueño del capitán) desenterró el tesoro. Así Alá le dio bendición y lo recompensó.

Nuestra propia existencia encierra algo así como un “problema de ingenio”, cuya solución nos reportaría un bienestar desconocido: el momento presente, es decir, ese único instante en el que todas las cosas suceden, encierra un tesoro de alegría, plenitud y paz que tal vez sólo hemos experimentado en algunas circunstancias excepcionales. Pero que podemos  recrear y crear si encontramos la clave paar ello. 

!Ánimo pues en el encuentro con tu clave!!






lunes, 28 de noviembre de 2016

DETENERSE en el ahora


!Namasté queridas!
Hoy traigo a este gran maestro Thich Nhat Hanh y este vídeo donde nos comparte sobre "Detenerse.En.El.Ahora".flv
Uno de los maestros zen más conocidos y respetados del mundo, poeta, activista por la paz y los derechos humanos, Thich Nhat Hahn (sus estudiantes lo llaman Thay, que significa "maestro") ha tenido una vida extraordinaria. Nació en el Vietnam central, en 1926, y se convirtió en monje a la edad de 16 años. La guerra de Vietnam enfrentó a los monasterios a la difícil cuestión de decidir si llevar una vida contemplativa y dedicarse solo a la meditación en los monasterios o ayudar a sus conciudadanos que sufrían bajo los ataques de las bombas y la devastación de la guerra. Nhat Hanh fue uno de los que decidió hacer ambas cosas, ayudando a fundar el movimiento del "Budismo comprometido". Ha dedicado su vida, desde entonces, al trabajo de la transformación personal para el beneficio de los individuos y la sociedad.

Me encantarán vuestros comentarios.
 

¿Por qué el 25 N?


Desde el Aula de Mujer hemos participado todos los talleres coordinados por YEDRA, Espacio Formativo de Empoderamiento y Salud. Y en esta ocasión como bien sabéis muchas de las que vais a leer esta entrada... hemos realizado una intervención denominada "Ruta libre de micromachismos"
Aquí os dejo los links donde podéis ver la fotogalería de mensajes.
Link al Facebook del Ayuntamiento de Rivas, RIVAS AL DÍA
 https://www.facebook.com/AyuntamientoRivas/?ref=page_internal


 Aquí puede verse la ruta completa en imágenes: https://www.flickr.com/gp/140502455@N05/qk2xeg
 VÍDEO DEL MONTAJE
 
 

jueves, 17 de noviembre de 2016

MEDITACIÓN DE LAS 4 PIEDRAS


 

Thich Nhat Hanh- 
Meditación de las piedras

La meditación de las piedras es un tipo de meditación creada para Shogun (¿) hace 25 años. Es una meditación fácil y divertida de practicar. Aunque fue creada para Shogun, todos podemos practicar la meditación de las piedras.

Durante el día, nuestro cuerpo puede estar aquí, pero nuestra mente puede que esté en otro lugar. Así que, cuando hacemos sonar la campana, traemos a nuestra mente a casa, a nuestro cuerpo.
La campana de conciencia es muy importante porque nos ayuda a traer a nuestra mente donde está nuestro cuerpo. Cuando mente y cuerpo están ahí, tú estás ahí verdaderamente, estás vivo verdaderamente.

sábado, 12 de noviembre de 2016

VALORAR EL PRESENTE


Namasté queridas y quizás ya tenga algún "querido" seguidor !también ;)!
Sigamos pues  profundizando sobre la práctica del "aquí y ahora", sobre la atención plena y la toma de  conciencia. 
Muy feliz tarde.
Inés  

jueves, 3 de noviembre de 2016

VIVIR EN EL AHORA



¿Quieres vivir en el aquí y ahora?

Te pasas media vida invirtiendo en tu futuro: preparándote para lo que te espera, pensando en si tendrás  trabajo o una persona con la que compartir tu vida. Te inculcan que pienses en el mañana, en cada paso que das, de modo que una buena parte de tu presente la dedicas a pensar en lo que vas experimentar dentro de unos años.

Después, llegas al último tercio de tu vida y nos sorprendemos con frecuencia enganchándonos a nuestro pasado, rememorando cuando podíamos hacer tal cosa, cuándo aún teníamos las fuerzas para tal otra o cuándo cualquier tiempo pasado fue mejor.

De esta sutil manera nos pasamos prácticamente la totalidad de la vida,  desviando tu  atención hacia el pasado o el futuro. Y mientras, el calendario, implacable,  ha seguido avanzando y la vida ha seguido su curso. “¿Dónde ha estado el presente que no me he enterado?”

Y es que el presente, la vida real, es lo que pasa mientras sigues ensimismada en el pasado o te anticipas al futuro. Vuelve, estás aquí y ahora. Te dejo con uno de esos cuentos de la India que te hacen reflexionar sobre cómo estás enfocando tu vida: ¿se te está escapando algo, o por el contrario te la bebes a pequeños sorbos?

Un hombre se le acercó a un sabio anciano y le dijo:
Me han dicho que tú eres sabio… Por favor, dime ¿qué cosas puede hacer un sabio que no está al alcance de las demás de las personas?
El anciano le contestó: cuando como, simplemente como; duermo cuando estoy durmiendo, y cuando hablo contigo, sólo hablo contigo.
Pero eso también lo puedo hacer yo y no por eso soy sabio, le contestó el hombre, sorprendido.
Yo no lo creo así, le replicó el anciano. Pues cuando duermes recuerdas los problemas que tuviste durante el día o imaginas los que podrás tener al levantarte. Cuando comes estás planeando lo que vas a hacer más tarde. Y mientras hablas conmigo piensas en qué vas a preguntarme o cómo vas a responderme, antes de que yo termine de hablar.
El secreto es estar consciente de lo que hacemos en el momento presente y así disfrutar cada minuto del milagro de la vida.

Como apuntaba el sabio, puedes estar convencida de que tú sí vives el día a día, pero una mirada más profunda puede delatarte. Observa cómo es relativamente fácil sorprenderte a ti misma alejándote del momento presente. El ritmo vertiginoso de la semana te empuja a la acción polifuncional y acabas llevando a cabo diversas tareas a la vez. 

Te dejo también con esta recopilación de  Emilio Carrillo donde habla sobre vivir el presente. 
Espero tus comentarios, por este espacio en en nuestras sesiones de Autoconocimiento y cuidado  corporal-emocional-  

Muy felices días. 
Namasté.
Inés


viernes, 28 de octubre de 2016

La PRÁCTICA DEL "AQUÍ Y AHORA"


MEDITAR  aquí y ahora
 
Te propongo para hoy mismo que hagas una meditación práctica aquí y ahora. Así de sencillo y así de retador. En este ejercicio práctico de hoy, te voy a mostrar de forma sencilla, la mejor manera de hacer una meditación práctica aquí y ahora. ¿Que necesitas?: Nada, solo ganas de experimentar y desarrollar un nuevo hábito en tu vida diaria que te reportará, sin buscarlo, buenos beneficios. ¿Vamos?…


Puede que mientras estés leyendo este texto, estés en casa frente a la pantalla del ordenador, quizás vayas en algún transporte público con tu tablet o tu móvil o estés en algún sitio sentada tomando algo tranquilamente. Pues bien, el problema es que tu cabeza no estará donde tiene que estar; que no es otro lugar que aquí y ahora, sino que andará saltando entre ideas del pasado e ideas del futuro. 

... Detente un momento. Toma conciencia de tu respiración. Solo quiero que seas consciente de ella sin modificarla. 

... Ahora ve posando tu mirada, sin juzgar, sobre lo que acontece a tu alrededor. Observa los objetos cotidianos que hay junto a ti, quizás gente sentada en el café, esperando o simplemente paseando. Posiblemente anden rápido. Si puedes y estás en un lugar rodeado de gente, observa sus caras. Es posible que te des cuenta de que muchos van como ausentes; autómatas podríamos decir. No hagas otra cosa durante un rato que observar la vida que se despliega a tu alrededor, tomando conciencia de tu respiración. ¿que sientes?, ¿como te sientes?.


Después de un rato, haz dos o tres respiraciones profundas y vuelve a tu normal actividad. No ha pasado nada y sin embargo quizás ha pasado todo. Puede haber sido tu primera toma de contacto con eso de “meditar”. Así de simple es hacer una meditación práctica aquí y ahora.


Cuéntame como te va con esta práctica, ¿vale?
Tus comentarios son muuuuy bien venidos. 
Feliz  en el aquí y ahora. 
Namasté.
Inés GS  







sábado, 22 de octubre de 2016

SI TU CREES QUE PUEDO...


Buen día!
Hoy traigo por aquí  un tema sobre el que propongo que reflexionemos... y  lo hagamos en serio !pero sin seriedad!
El efecto que tienen lo que  las personas que nos importan, (y posiblemente las que no), tiene sobre el desarrollo de nuestras potencialidades.
Me egustarían muchos comentarios y opiniones que enriquezcan este espacio.
Namasté
Inés
 

 

¿De qué manera pueden verse alterados nuestros comportamientos a partir de las creencias que los demás tienen sobre uno? ¿Las expectativas favorables que sobre nosotros/as tiene nuestro entorno de afectos y amistades puede llevarnos a llegar más allá de lo que esperamos? O por el contrario, ¿cuántas veces ni lo hemos intentado o nos ha salido mal movidos por el miedo al fracaso que otros nos han transmitido, por su falta de confianza, por su invitación a la resignación y al abandono?

No es descabellado afirmar que cada día en nuestras vidas hay actos que suceden porque, consciente o inconscientemente, estamos respondiendo a lo que las personas que nos rodean esperan de nosotros, para lo bueno y para lo malo. Puede tratarse de la expectativa del amigo, de la pareja, del jefe e incluso de nuestros hijos. Lo que los demás esperan de uno puede desencadenar en un conjunto de acciones que nos lleven mucho más allá de lo que podemos imaginar, en lo mejor y en lo peor. A este principio de actuación a partir de las creencias y expectativas de los demás se lo conoce en psicología como el Efecto Pigmalión.
Tan curioso nombre nace de la leyenda de Pigmalión, antiguo rey de Chipre y hábil escultor. Ovidio en su “Metamorfosis” recreó el mito y nos contó que Pigmalión era un apasionado escultor que vivió en la isla de Creta. En cierta ocasión, inspirándose en la bella Galatea, Pigmalión modeló una estatua de marfil tan bella que se enamoró perdidamente de ella, hasta el punto de rogar a los dioses para que la escultura cobrara vida y, de este modo, poder amarla como mujer real. Venus decidió complacer al escultor y dar vida a esa estatua que se convirtió en la deseada amante y compañera de Pigmalión. La expectativa cargada de deseo se hizo finalmente realidad.
Como vemos en la leyenda, el Efecto Pigmalión es el proceso por el cual las creencias y expectativas de una persona respecto a otro individuo afectan de tal manera su conducta que el segundo tiende a confirmarlas. Un ejemplo sumamente ilustrativo del Efecto Pigmalión nos lo legó George Bernard Shaw, quien en 1913 creó, inspirado por el mito, la novela “Pigmalión” que años más tarde, en 1964, fue llevada al cine por George Cukor bajo el título “My Fair Lady”. En esta cinta, el narcisista profesor Higgins (Rex Harrison) acaba enamorándose de su creación, Eliza Doolittle (Audrey Hepburn), cuando consigue convertir la que es al inicio de la historia una muchacha desgarbada y analfabeta del arrabal en una dama moldeada a las expectativas fonéticas, éticas y estéticas del peculiar Higgins.

En el terreno de la psicología, la economía, la medicina o la sociología, diversos investigadores han llevado a cabo interesantísimos experimentos sobre la existencia y potencia del Efecto Pigmalión. Quizás uno de los más conocidos es el que llevaron a cabo en el año 1968 Robert Rosenthal y Lenore Jacobson con el título “Pigmalión en el aula”. El estudió consistió en informar a un grupo de profesores de primaria que a sus alumnos se les había administrado un test que evaluaba sus capacidades intelectuales. Luego se les dijo a los profesores cuáles eran, concretamente, los alumnos que obtuvieron los mejores resultados. Se les dijo también que era de esperar que estos alumnos destacados en el test de capacidades serían los que mejor rendimiento tendrían a lo largo del curso académico. Y así fue. Al finalizar el curso, ocho meses después, se confirmó que el rendimiento de estos “muchachos especiales” fue mucho mayor que el resto. Hasta aquí no hay nada sorprendente. Lo interesante de este caso es que en realidad jamás se realizó tal test al inicio de curso. Y los supuestos alumnos brillantes fueron un 20% de chicos elegidos completamente al azar, sin tener para nada en cuenta sus capacidades. ¿Qué ocurrió entonces? ¿Cómo era posible que alumnos corrientes fueran los mejores de sus respectivos grupos al final del curso? Muy simple, a partir de las observaciones en todo el proceso de Rosenthal y Jacobson, se constató que los maestros se crearon una tan alta expectativa de esos alumnos que actuaron a favor del cumplimiento de tal expectativa. De alguna manera, los maestros se comportaron convirtiendo sus percepciones sobre cada alumno en una didáctica individualizada que le llevó a confirmar lo que les habían dicho que sucedería.
Muchos otros estudios similares se han producido en los últimos años que han tendido a confirmar la existencia de este efecto, que por otro lado, es de puro sentido común. Sin duda, la predisposición a tratar a alguien de una determinada manera queda condicionada en mayor o menor grado por lo que te han contado sobre esa persona.
Otro llamativo caso sucedió en una conocida empresa multinacional fabricante de productos de alta tecnología. Los responsables del Departamento de Personal convocaron a una persona de su servicio de limpieza, en el último escalafón de la jerarquía de la organización, que ni tan solo tenía el bachillerato finalizado, y le dijeron al hombre en cuestión que era, entre todos los miles de miembros de la empresa, quien estaba mejor capacitado para, en el plazo de dos años, ocupar un altísimo cargo de responsabilidad técnica, y que para ello contaría con todos los medios y soporte de la multinacional. Las consideraciones éticas sobre este procedimiento darían mucho de sí, pero el caso es que esta persona no sólo llegó a desempeñar las funciones del alto cargo prometido en menos tiempo del previsto, sino que años después siguió prosperando en la organización siendo además una persona con un enorme carisma y consideración dentro de su área. La profecía se cumplió de nuevo a una velocidad y con un éxito extraordinario, más allá incluso de lo que los propios promotores del experimento imaginaban.

En efecto, le perspectiva de un suceso tiende a facilitar su cumplimiento. Y eso ocurre también en muchos otros ámbitos. En el terreno de la investigación científica o social, el investigador tiende muchas veces a confirmar sus hipótesis por descabelladas que parezcan; siempre existe el dato que todo lo confirma. En economía, un caso del cumplimiento del efecto Pigmalión a gran escala se vivió con la crisis económica de 1929. Si muchas personas están convencidas de que el sistema económico se hunde, se hundirá. Incluso hablando de nuestra propia salud, el Efecto Pigmalión se manifiesta en el también conocido Efecto Placebo. De este modo hay quien cree obtener del medicamento lo que necesita obtener cuando en realidad se trata de una pastilla de almidón, neutra, sin principios activos. ¿Por qué cura entonces, en determinados casos, un caramelo inocuo? Simplemente porque el médico nos dice que nos curará. Porque hay alguien en quien creemos que nos asegura que eso nos hará bien y porque deseamos curarnos.

Y claro, ¡cómo no!, volviendo al mito, Pigmalión también hace de las suyas en casos de enamoramiento. No son pocos los celestinos y las celestinas que han generado tórridas pasiones entre personas que, de entrada, no parecían tener química. En algunos casos ha bastado que el celestino en cuestión susurre al oído de las víctimas la insinuación del deseo del otro para que la mirada y el lenguaje del cuerpo cambien radicalmente la expresión que propicia una primera aproximación.
Incluso si analizamos las biografías de grandes genios, mujeres y hombres que a lo largo de la historia han hecho enormes aportaciones a la humanidad en terrenos tan distintos como la ciencia, el arte, el deporte, la empresa, etcétera, veremos que en muchos casos había una persona que tenía una fuerte esperanza depositada en el genio en cuestión y que sin ella, probablemente, la vida del genio habría sido radicalmente distinta.

Y es que Pigmalión tiene una explicación científica: hoy sabemos que cuando alguien confía en nosotros y nos contagia esa confianza nuestro sistema límbico acelera la velocidad de nuestro pensamiento, incrementar nuestra lucidez, nuestra energía y en consecuencia nuestra atención, eficacia y eficiencia.

Las profecías tienden a realizarse cuando hay un fuerte deseo que las impulsa. Del mismo modo que el miedo tiende a provocar que se produzca lo que se teme, la confianza en uno mismo, aunque sea contagiada por un tercero, puede darnos alas.

INFORMACIÓN traída desde el muro de Alex Rovira.
 

lunes, 17 de octubre de 2016

REINICIARNOS PARA RENOVARNOS




Tu vida tiene derecho a hacer borrón y cuenta nueva

En un vaso lleno ya no cabe agua. Este es uno de los principios fundamentales de cualquier tipo de cambio. Es imposible cambiar drásticamente tu vida y reescribir tu historia si no dedicas un tiempo para hacer limpieza en la maleta de tu experiencia acumulada.
Tu rompecabezas de la vida siempre se juntará en la misma imagen si utilizas los mismos elementos, no importa cuántas veces revuelvas las piezas.
Debes empezar la renovación consciente de tu vida con un total reinicio. No con la búsqueda de nuevos objetivos, no con las ideas de lo que vayas a ser dentro de cinco años, no preguntándote acerca de tu misión y objetivo en esta vida. Porque todos estos procesos te enredarían con tus ideas antiguas que, además, consumen mucha energía.
Debes empezar sacando toda la basura de tu vida: a nivel físico, energético y mental.

La acumulación descontrolada del pasado lleva a las siguientes dos cosas:
  1. Recreación infinita de los patrones de tu pasado. La vida empieza a parecer un déjà vu.
  1. Desaceleración del ritmo de tu vida, cuando miras a aquellas personas que logran hacer tres veces más que tú y no entiendes cómo es que tienen tiempo para hacerlo. El éxito en la vida y la realización en todos los campos únicamente es posible a alta velocidad.
Tiene caso realizar una gran limpieza en tres dimensiones: el pasado, el presente y, no te sorprendas, el futuro. Sí, en tu futuro ya hay montones de basura en forma de tus suposiciones acerca de cómo será; por lo tanto, también necesita una limpieza a fondo.
Propongo empezar con el presente. Es la dimensión más concreta porque está situada aquí y ahora. Deshacerse completamente del tiradero que está en tu interior y en tu entorno, te otorgará muchas fuerzas y energías frescas, lo cual vas a necesitar más adelante.

MUY FELIZ VUELTA A ESTE ESPACIO 
 
Abro espacio para al reflexión conjunta a través de tus comentarios.  

                     Inés  

Re-Escribiendo la historia de las mujeres



La construcción patriarcal de la diferencia entre la masculinidad y la feminidad es la diferencia política entre la libertad y el sometimiento.
Carole Pateman
La división sexual del trabajo, esto es, que los hombres y las mujeres realicen tareas diferentes, rememora la tradicional dualidad hombre-cazador versus mujer-recolectora. Da por supuesto que la caza requiere mayor fuerza física y velocidad, por lo que habría sido una labor propia de los hombres, mientras que la recolección de alimentos vegetales sería más compatible con la menor fuerza física de las mujeres y las restricciones impuestas por la gestación y el cuidado de la prole. Según este modelo, la división sexual del trabajo se habría originado por diferencias biológicas típicamente asociadas al sexo, es decir, a características «naturales» propias de los machos o de las hembras.
Sin embargo, cuando se intentan reconstruir comportamientos humanos de sociedades prehistóricas los datos empíricos disponibles son lamentablemente escasos. Tan es así que numerosos especialistas coinciden en que de dichas conductas solo pueden extraerse hipótesis más o menos sesgadas. En este sentido, la arqueóloga y catedrática del Instituto de Prehistoria y Protohistoria de la Universidad Erlangen-Nürnberg, Linda Owen, en 2014 apuntaba: «Los roles sociales de cada sexo predominantes en épocas lejanas, a duras penas pueden reconstruirse».
Ciertamente, en los modelos sugeridos con el fin de recuperar comportamientos de tiempos remotos, los prejuicios han sido tan difíciles de evitar que los estudiosos varones, blancos y europeos han analizado las sociedades del pasado desde una perspectiva masculina, blanca y eurocéntrica. De esta manera, las nociones y normas de la vida moderna se han extrapolado a pueblos de homínidos extintos, dividiendo convencionalmente las actividades de ambos sexos: ellos iban de caza y protegían a sus familias, ellas recolectaban hierbas y frutos y se ocupaban de los niños.
Esta suposición lleva implícito que los hombres eran activos, sumamente móviles y se desplazaban largas distancias tras sus presas, mientas que las mujeres se quedaban a la espera, pasivas y sedentarias, en un entorno físico limitado. Pero de esa imagen tan «natural» han ido surgiendo dudas y cuestionamientos cada vez más obvios; por ejemplo, Linda Owen se pregunta: «¿Cómo podían los hombres proteger a las mujeres y a los niños si se encontraban fuera del campamento la mayor parte del tiempo?»
El esfuerzo por describir las funciones sociales femeninas en pueblos antiguos (incluso muy antiguos) como si fueran un calco de la sociedad occidental del presente ha provocado en los últimos años encendidos debates y flagrantes contradicciones. Los desacuerdos, cada vez más profundos, fueron abriendo espacios para sospechar que dividir el trabajo en función del sexo ha tenido menos que ver con el respeto a la naturaleza y más con trasladar al pasado remoto una forma de pensar del presente.
Además, la comunidad académica ha equiparado casi por consenso las diferentes tareas con jerarquías de desigualdad, impulsando y fortaleciendo esa tendencia generalizada que presupone la universalidad del dominio masculino. Como no podía ser de otra manera, el resultado ha generado importantes distorsiones al interpretar de un modo replicante los orígenes del comportamiento de las sociedades humanas.
Por otra parte, el debate se vuelve más complejo porque un conjunto considerable de expertos no admite que otras especies de homínidos distintas de la nuestra hayan tenido división sexual del trabajo. Por el contrario, sostienen que el reparto de las tareas es un comportamiento propio y exclusivo de Homo sapiens, señalando además que su emergencia habría coincidido con la llegada a Europa de los humanos anatómicamente modernos, unos 40-50.000 años antes del presente. Siguiendo este modelo, solo nuestra especie habría alcanzado el pensamiento simbólico, el cual es capaz de definir categorías sociales y asignar tareas en el grupo. En consecuencia, la división sexual del trabajo habría sido el motor que condujo a sistemas de adaptación tan eficaces que permitieron a los humanos modernos explorar nuevos ambientes «hasta cada esquina del mundo».
En síntesis, parece claro que con los datos en la mano no puede establecerse con precisión si a lo largo de la evolución humana hubo o no división del trabajo en función del sexo. Para muchos autores, separar las tareas es un hecho universal, y sostienen que ese reparto se remonta hasta los orígenes de los primeros homínidos, hace alrededor de 6 o 7 millones de años. Para otros, por el contrario, se trata de un fenómeno propio y exclusivo de Homo sapiens y no tiene más de 50.000 años de antigüedad.

Nuevos hallazgos estimulan el debate

La encendida polémica sobre la división sexual del trabajo y sus orígenes se vio avivada en 2006 por la publicación de un artículo firmado por los antropólogos de la Universidad de Arizona Mary C. Stiner y Steven L. Kuhn. Estos especialistas defendieron una tesis sobre la organización de la vida de los neandertales cuyos ecos sobrepasaron el mundo académico y alcanzaron a los medios de comunicación y al público en general.
Los investigadores Stiner y Kuhn realizaron un minucioso estudio de numerosos huesos fósiles de Homo neanderthalensis, detectando que estos huesos presentaban cicatrices resultantes de fracturas producidas por la dureza de las condiciones de vida de aquellos humanos. Los autores separaron los restos óseos procedentes de hombres y de mujeres y los analizaron con gran detalle. Tras sus metódicas observaciones, llegaron a la conclusión de que no había diferencias en la morfología ni en el patrón de las cicatrices encontradas en los restos de uno y otro sexo. Interpretaron este hecho asumiendo que tal similitud sólo podía atribuirse a que las heridas óseas tenían un origen muy parecido y que, por lo tanto, probablemente las mujeres y los hombres neandertales llevaban vidas semejantes y realizaban trabajos análogos.
neander
Además, Kuhn y Stiner certificaron que la evidencia empírica señalaba con nitidez que las mujeres neandertales eran personas fuertes y autosuficientes, muy parecidas anatómicamente a sus compañeros varones. Esas pruebas contradecían el  comportamiento sedentario pues resultaba, cuanto menos, poco coherente. En palabras de los investigadores: «los esqueletos de las mujeres neandertales estaban tan robustamente construidos que parece improbable que ellas simplemente se sentaran en casa cuidando sus hijos».
En suma, en la cultura neandertal los hombres y las mujeres parecen haber realizado labores muy semejantes entre sí, lo que no impediría, advierten los científicos, que desempeñaran algunas labores diferentes, pero siempre dentro de un esquema general compartido.
Con todo, el debate no ha quedado aquí. En los últimos años se ha enriquecido considerablemente, al abrigo de los numerosos descubrimientos relacionados con el ámbito de la paleoecología, disciplina que tiene como objetivo reconstruir ecosistemas del pasado y configurar un punto de partida para conocer los diferentes recursos alimenticios que los homínidos tenían a su alcance, ponderándose las estrategias que seguían para aprovecharlos. Un enfoque que, además, también ayuda a visualizar la complejidad del comportamiento de nuestros antepasados, cómo era su organización social y, en definitiva, para calibrar su capacidad de adaptación al entorno que habitaban.
Gran parte de estos novedosos estudios se han basado en el examen de dientes fosilizados y en el patrón de desgaste dental observado. Pero, como ha apuntado el profesor Nathan H. Lents, «hasta muy recientemente, nadie se había planteado si las marcas observadas en los dientes de los neandertales eran distintas entre los hombres y las mujeres. Cuando lo hizo un equipo español, los resultados fueron sorprendentes».
Los investigadores muestran una ilustración de los neandertales. Foto CSIC.
Antonio Rosas y Almudena Estalrrich muestran una ilustración de los neandertales ayudándose
de la boca para realizar tareas cotidianas (Comunicación CSIC).
El citado equipo estaba compuesto por los científicos del Museo de Ciencias Naturales de Madrid, CSIC, la doctora en paleontología Almudena Estalrrich y el prestigioso experto en neandertales, Antonio Rosas. En 2005 publicaron un interesante estudio centrado en los dientes fósiles de Homo neanderthalensis y su posible relación con la división sexual del trabajo. La investigación desvelaba un perceptible desgaste dental en los incisivos y los caninos, al apreciarse una serie de marcas o huellas. Dichas marcas sugerían que, a lo largo de sus vidas, los neandertales habrían usado la dentadura para manipular objetos al sujetarlos o sostenerlos con la boca tal como si fuese una «tercera mano».
yacimientos-estudiados
Concretamente, Estalrrich y Rosas examinaron con detalle las estrías o rayas superficiales y las melladuras o golpes presentes en los incisivos y caninos de 19 individuos procedentes de los yacimientos de l’Hortus (Francia), Spy (Bélgica) y El Sidrón (España). Los dos tipos de marcas analizadas se debían a prácticas o actividades no masticatorias. Las estrías mayormente resultan de una tarea repetitiva basada en sujetar o estirar pieles, fibras vegetales u otros utensilios que puedan sostenerse con la boca. Las mellas, por su parte, son probablemente el resultado de un trauma, ya sea por incidir contra algo muy duro o porque el diente se quiebra mientras realiza alguna función.
Tanto los hombres como las mujeres presentaban estrías en la cara labial (frontal) de sus incisivos, pero esas estrías eran considerablemente más largas en las mujeres. Esto no indica que ellas usasen sus dientes para más tareas que los hombres (lo que habría causado estrías más profundas, no más largas), sino que los empleaban para tareas distintas. Además, pese que ambos mostraban mellas, éstas estaban en zonas diferentes. Los hombres típicamente las mostraban en los dientes de arriba, mientras que las mujeres las tenían en los dientes de abajo.
Diente de la mandíbula de un neandertal (cueva de El Sidrón).
Diente de la mandíbula de un neandertal,
cueva de El Sidrón (Comunicación CSIC).
Los autores concluyeron que las diferencias detectadas en el patrón de desgaste dental no masticatorio, aunque sutiles, parecen indicar que las mujeres y hombres neandertales utilizaban sus dientes con fines algo distintos. Cabría entonces pensar y deducir que la división del trabajo por sexos no ha sido una característica específica de Homo sapiens, sino que, por el contrario, los neandertales de hace unos 40.000 años ya dividían algunas de sus faenas entre mujeres y hombres. Los científicos no tienen claro qué actividades eran las que realizaba cada sexo, pero sí consideran probable que la especialización o división del trabajo estuviera limitada a unas pocas labores.
Tanto Antonio Rosas como Almudena Estalrrich ponen el acento en la importancia que tiene la posible separación de las faenas según el sexo, incluso aunque sea reducida, porque viene a sumarse al incremento que han experimentado en estos últimos años nuestros conocimientos sobre la cultura de los neandertales.
De hecho, los datos más recientes no sólo sugieren que nuestros parientes vivieron en comunidades socialmente complejas, sino que en sus sociedades las mujeres fuertes, vigorosas y autosuficientes, con toda probabilidad participaban en la vida comunitaria como sujetos activos, trabajando codo con codo junto a los hombres con el fin de adaptarse y sobrevivir en aquellos ecosistemas duros y difíciles.
En suma, el añejo modelo femenino de sumisión, pasividad y dependencia, tan querido y alardeado por el pensamiento convencional de nuestras sociedades occidentales, se está desmoronando con gran estruendo. Cambia el paradigma dominante, toda una revolución y reconversión de ideas-fuerza en esa nueva mirada interpretativa.

Referencias

Sobre la autora

Carolina Martínez Pulido es Doctora en Biología y ha sido Profesora Titular del Departamento de Biología Vegetal de la ULL. Su actividad prioritaria es la divulgación científica y ha escrito varios libros sobre mujer y ciencia

desde el blog