Próximas ya a finalizar este año 2016 y este trimestre en el que hemos estado trabajando en nuestras sesiones en el concepto del "aquí y ahora", y en su práctica, quiero hacer un cierre como merece... elevando la mirada hacia nuestra dimensión de seres también espirituales. Por supuesto sin divisiones, si no en interrelación cuerpo, mente, emociones, alma. Cada vez más salen estudios de los efectos que tiene el tener en cuenta esta dimensión, en nuestro bienestar global. Está bien que la ciencia lo respalde pero lo mejor !es probarlo! Y comprobarlo por nosotras mismas.
Una de las ideas que normalmente trato de
compartir es que la vida es casi siempre muy simple y fácil de
disfrutar. Y cuando no podemos verla así en general es porque nos
concentramos en ciertos aspectos negativos de lo que sucede a nuestro
alrededor y condicionamos nuestro bienestar a la solución de una
interminable lista de problemas.
También muchas veces propongo recordar nuestra dimensión de SER espiritual, cada cuál como lo sienta y entienda (religioso, ecológico transpersonal, místico, etc), y poder conectar y colocarse en esta dimensión cuando no nos sentimos
bien o si necesitamos algo que no podemos conseguir con nuestro propio
esfuerzo individual. Poder sentirnos Unidad, formando parte del Todo, logrando así alejar la profunda soledad que podemos llegar a sentir en momentos vitales críticos, ya sean por razones externas o internas. En realidad somos parte de ese Todo, y
podemos volver a conectarnos con esa Fuente a través de cualquier
actividad que expanda nuestra conciencia, como la oración, la práctica
de la meditación, la conexión profunda con la naturaleza o la apreciación deliberada de cada cosa buena que nos
rodea aquí y ahora.
Aquietar nuestra mente y experimentar gratitud
serían entonces las claves olvidadas para recuperar ese bienestar que
tanto anhelamos. !Qué idea tan simple y poderosa!
Seguramente repito tanto este mensaje porque es el que yo misma estoy
tratando de aprender…
Quisiera ser cada día como como una protagonista que comprende que algo no va bien en su realidad y
decide liberarse de la pesada carga que la limita, que tiene el coraje
de elevarse siempre, confiando en su intuición.
Porque aunque comprendamos que la vida es simple y fácil de disfrutar
y que podemos convocar a ese Todo, del que formamos parte,
para crear conscientemente la realidad que deseamos, de todas maneras
tenemos que tomar la decisión de hacerlo de una buena vez, debemos
esforzarnos para sostener e incrementar nuestro nivel de consciencia.
Porque si no hacemos nuestro mejor esfuerzo podemos seguir actuando indefinidamente de manera mecánica, como nos
sucede habitualmente cuando nos identificamos con nuestro ego y vivimos
de acuerdo a sus creencias limitantes.
Para ser felices tenemos que esforzarnos con mucha atención, y debemos ser también disciplinadas…
aunque esta idea parezca contradictoria no lo es. Se trata de asumir la responsabilidad de nuestro bienestar y aplicarse a ello con las herramientas que vamos conociendo, la actitud adecuada y la pasión y determinación que se requiere.
Muy Felices Fiestas y muy Próspero en bienestar para todos los seres sintientes del planeta y de las galaxias.
Ha sido un honor y un placer acompañaros en este proceso de conocimiento y práctica del "aquí y ahora" Mi agradecimiento y cariño por permitírmelo.
Namasté queridas.
Inés
Aquí dejo un vídeo musical con mandalas para potenciar esa energía creadora de bienestar.
Os dejoUn este vídeo musical con ara activar la energía creativa de bienestar. Espero que os guste
Gracias a ti, Ines.
ResponderEliminar